por Arq. Eliseo CABRERA /
Arquitectura bioclimática, sine qua non
La arquitectura bioclimática es una condición necesaria para la eficiencia energética en edificaciones, el impacto de las acciones coordinadas entre consumo eficiente de arquitectura bioclimáticas nos brindan la posibilidad de acercarnos al costo cero. Un escritor y humorista norteamericano, ArnoldGlasow dice que uno de los principales objetivos de la educación debe ser ampliar las ventanas por las cuales vemos al mundo, esta frase no sólo refiere a la actividad de las personas que enseñan en una aula sino que es parte de la profesión de arquitecto ya que en muchas de nuestras acciones directa o indirectamente estamos ampliando las ventanas por las cuales nuestros clientes miran al mundo, en muchos casos nos encontramos realizando tareas de enseñanza cuando explicamos la ventaja o desventaja de determinadas soluciones constructivas y asesoramos a quienes quieren realizar sus casas el mismo autor dice que el problema con el futuro es que normalmente llega antes de que estemos preparados por eso nuestra profesión también está obligada a prever algunos de los cambios que nuestra sociedad a de experimentar en los próximos días o 50 años.
Desde esta óptica sentimos cada vez con más fuerza frases como cambio climático eficiencia energética consumo razonable preservación de los recursos naturales etc. las edificaciones tienen mucha responsabilidad en el consumo energético para mantenerlas confortables (http://www.doblealturadeco.com/juego-de-roles/) así entonces la calefacción más económica es la que no se prende la iluminación más económica es la que no se enciende la refrigeración más económica es la que no es necesario hacer funcionar en definitiva la casa más económica es la que menos consume la que menos se enfría en invierno y la que menos se calienta en verano podemos decir sin temor a equivocarnos que un diseño eficiente energéticamente además de utilizar la tecnología para reducir el consumo debe tener un buen diseño del acondicionamiento natural, es por eso que el título de este artículo incluye la frase en latín ¨sine qua non¨, o sea sin la que no es posible reafirmando el concepto de que no es posible obtener eficiencia energética sin viviendas acondicionadas naturalmente.
Muchos libros se han escrito referidos a la arquitectura bioclimática, o lo que es lo mismo el acondicionamiento natural, pero sin duda las estrategias más importantes son la inteligencia, la sensibilidad y el proyecto.
Ninguna de estas estrategias puede agregarse luego de terminado un proyecto sino que es imprescindible en esta disciplina la incorporación desde la génesis del diseño proyectual de todos los elementos bioclimáticos para que articulen en forma ordenada con el edificio proyectado. Inteligencia para detectar y resolver técnicamente los problemas que el medio nos impone sensibilidad para escuchar y entender las variables de ubicación, entorno, clima, asoleamiento que nos impone el lugar por último proyecto, diseño, trabajo, para lograr una arquitectura agradable, estéticamente aceptada, funcional y que ofrezca confort y ahorro.
Al clásico concepto de la ventilación cruzada, o las ventanas orientadas al norte con aleros que permite ingreso de sol en invierno y sombras en verano también podemos agregar estrategias bioclimáticas menos utilizadas como por ejemplo el “efecto bodega” haciendo circular aire del exterior por túneles bajo tierra antes de introducirlo en las habitaciones logra reducir el salto térmico entre temperatura del aire exterior y temperatura del aire interior, intercambiadores de calor que recuperan el calor transportado por el aire que es expulsado hacia el exterior, básicamente un tubo adentro de otro en donde se circula el aire que expulsamos por un tubo y se ingresa el aire fresco por el otro y en el trayecto el aire que entra intercambia calor con el que sale para refrescarse en caso de verano o calentarse en caso de invierno.
El aprovechamiento de energía solar térmica tanto para calentamiento de agua como para calentamiento del aire también es una herramienta importante para lograr el acondicionamiento natural de un edificio. Los sistemas de protección solar en base a la utilización de vegetales vivos y el estudio de la capacidad térmica de los cerramientos, la utilización de Doble vidriados, y el equilibrio entre vacío y lleno de las fachadas de un edificio también son herramientas eficientes para lograr ahorros importantes. Estas prácticas lejos de coartar la creatividad de los arquitectos pueden transformarse en un fuerte sustento teórico y un firme punto de partida a la hora de proyectar, no sólo proyectemos algo lindo sino que además proyectemos algo eficiente energéticamente.
