“La calidad se demuestra ejecutando. El camino es la recompensa”. Así resume Federico Santo la experiencia de la World Confederation of Businesses (WORLDCOB), organización comprometida con la misión de promover la Responsabilidad Social Empresarial a nivel mundial, al certificar a Frío Máximo en RSE por segundo año consecutivo en diciembre de 2015, en el rubro Refrigeración / Aire Acondicionado.
El proceso de certificación contempla al mismo tiempo temas relacionados al medioambiente, a los recursos humanos y a la interacción de la empresa con la comunidad. “Apostamos a una forma de ser empresa, la RSE nos apoya en este camino. La inequidad salarial y la desigualdad social deben reconvertirse manteniendo una línea de trabajo, proponiendo retos como empresa que van más allá de lo que podemos evaluar. A largo plazo nos proponemos y compartimos buenas prácticas laborales, y así vamos a mejorar todos”, expresa.
La certificación coronó un año de grandes satisfacciones para Frío Máximo, que también fue seleccionada como la primera empresa uruguaya en instalar sistemas de aire acondicionado en la Base Científica Antártica Artigas. El proyecto, que nació en la Oficina de Eficiencia Energética de UTE, proponía sustituir las estufas eléctricas por un equipo de alta eficiencia del tipo bomba de calor Inverter Mitsubishi Electric. La idea se tornó realidad cuando el Buque Antártico y de Salvamento ROU 26 “Vanguardia” zarpó del Puerto de Montevideo rumbo a la Antártida, en febrero de 2015, con los equipos de refrigeración, paneles para la construcción de un nuevo galpón y máquinas retroexcavadoras para trabajos en el suelo de la base. Allí se instaló también un Recuperador entálpico Mitsubishi Electric, equipo que renovará el aire del sector del comedor de la base, recuperando hasta el 80% del calor del aire extraído, mejorando sustancialmente los niveles de CO2 sin sufrir pérdidas de calor en el proceso.
De esta manera Frío Máximo, distribuidor en Uruguay de la prestigiosa marca japonesa, tuvo a cargo la comercialización, instalación y puesta en marcha de estos equipos de aire acondicionado, que ofrecen el 100% de rendimiento a -20°C y trabajan al 80% de su capacidad hasta los -25°C. Esto transformó a Uruguay en el primer país del mundo en instalar un equipo Mitsubishi Electric en la Antártida, siendo el primero de la línea Zubadan vendido en América Latina. La colocación de los equipos implicó el desarrollo de una ampliación de unos 50 metros cuadrados sobre la construcción existente, ya que fue necesario edificar para albergar la sala de máquinas y ampliar el comedor. Ese gran desafío complementó de la mejor manera el desarrollo como empresa, que también aborda desde hace 20 años la instalación y servicio técnico de equipamiento residencial, comercial e industrial.
“Trabajar en la Antártida no sólo representó la dificultad de enfrentar una nueva experiencia en un entorno que para nosotros como país es totalmente nuevo, sino que también debimos contemplar todo lo referente al Tratado Antártico al cual Uruguay está suscripto. Nuestra ventaja como empresa en ese terreno fue la práctica sistemática de realizar nuestros trabajos con excelente calidad y buenas prácticas medioambientales”, concluye Santo.
