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Un monoambiente muy versátil, como la vida misma

En un apartamento tan mínimo como práctico en el corazón de Pocitos, convive una paleta muy jugada que abarca azules y rosas con mucha personalidad

El interiorismo fue ideado para una pareja uruguaya que reside en Italia. Es técnicamente un monoambiente, sin embargo allí, la vida transcurre itinerante. Fue concebido para hospedar viajeros, en su mayoría jóvenes aventureros que vienen temporalmente a trabajar o simplemente a conocer Montevideo por períodos cortos de tiempo.

El desafío para el Estudio 1601, al mando de la diseñadora Leticia Achard, consistió en dividir el espacio en cuatro áreas, optimizando su condición de monoambiente y los escasos metros cuadrados disponibles, una decisión funcional que no siempre se logra el éxito.

Se preguntarán: ¿Cuánto influye el mobiliario en esta propuesta? “Muchísimo, es exactamente el punto”, indica Achard, cuya pasión por el diseño se fusiona con el arte y la fotografía para lograr identidades solicitadas. El acceso y el área de la cocina aparecen signados por el recurso del color. El área de trabajo está definida por un mobiliario fijo. El tercer espacio es el dormitorio y el último lo conforma la terraza que, aunque de escasas dimensiones, se transformó en un espacio muy disfrutable para las tardecitas veraniegas con una barra sobre la baranda que invita a sentarse y balconear desde un espacio que antes estaba en desuso

Lámpara central realizada de palillos (de Cecilia Trambauer), gigantografía “Mais amor por favor” diseñada por el estudio e inspirada en el conocido cuadro de Ygor Marotta del movimiento underground de Sao Paulo, Brasil. Los cuadros (de Decocuá) marcan detalles sumamente urbanos y divertidos para quienes se identifican con estos gestos de diseño.

 

Un diseño simple pero atractivo. El escritorio laqueado blanco con estantes, fue diseñado a medida con caballetes en madera color natural.
El panel que reviste la pared es de madera de álamo con terminación natural y vetas bien marcadas. Su objetivo fue centralizar el área de trabajo y el espacio de la televisión. Resultó además, un excelente recurso para ocultar cables, ya que se prestó especial atención al perfil extranjero del usuario, contemplando la accesibilidad a variedades de tomas eléctricas y conexiones usb, lo que suele ser un inconveniente al llegar a otro país. El espacio lo completa la luminaria de mesa Draco (de Zum iluminación).

 

“Veíamos que existía en el mercado la necesidad de realizar proyectos a los que llamamos “llave en mano”. Estos son desafíos en los que se conjugan varias disciplinas, y en los que pensamos hasta en el último detalle; lo cual es la clave para un buen diseño. Nuestro estilo es versátil y depende de los requisitos de cada cliente. Nos identificamos 100% con la mezcla de estilos, sin llegar al eclecticismo, pero tampoco al extremo de un estilo limpio y puro. Lo formal y clásico se combina con lo retro y vintage. Todo vale, el toque diferente es lo que da el encanto: mezclar estilos es parte de nuestra pasión”, concluye Leticia Achard.

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